VOLVER

POEMA DE AHORITA MISMO
Quisiera volver, pero no sé dónde.
Algún lugar pequeñito,
que me arrope en invierno
y en verano me de sombra y brisa.

El horizonte está siempre tan lejos,
y el cielo siempre tan alto.
Las nubes blancas,
todas las tardes tropiezan
y cuando caen,
del golpe, se ponen rojas
o llenas de moratones.

Los arboles son los anunciadores
de las direcciones de los vientos
Los pájaros merodean buscando
sus presas para cazar trocitos de pan.

Busco donde regresar
y la memoria no me llega a tanto.
Espero encontrar una plaza
donde tener un viernes de otoño

Quizá tuviera alamedas
con aceras paseadoras,
con parques donde niños juegan
y sonríen sin permiso de nadie.

Quizá sea un pueblecito
Chiquito con chimeneas humeantes
Nubes de leña que se dejan llevar por el aire
a donde van, al humo le vale.

Senderos con hierbas que al pisarlas
lo llenan todo de olor a vida.
Olor que también se va con los vientos
Quizá debiera irme
con las corrientes de aire.

No sé si quiero volver.
Quizá no tenga donde regresar
Quizá un bosque profundo y alto
sea mi guarida, chiquita y humilde.
Volver al futuro, quizá sea lo mejor,
Tener arboles longevos como vecinos
con miles de historias por contar
las tardes sombreadas de verano.

Riachuelo que habla cuando
choca contra las piedras.
Agua que sabe dónde va,
que se faja contra las orillas.

Quizá vuelva a la soledad
Quizá me haga serenidad
después de una vida explosiva.
Quizá me haga una bandera estoica
la hice todos los días
para gritar al bosque mi esencia

bosque cueva
bosque guarida
bosque madriguera
bosque escondrijo
bosque madre
que me da luz, sombra, olores
sosiego y calma.
Mirar desde mi piedra de mirar
Oír desde mi piedra de oír
Sentarme en mi piedra de sentar
Melancolizarme desde mi piedra de melancolías.
Esperar a que llegue el momento
desde mi cobijo lleno de vida.

OBRA DE ANTOLÍN PULIDO