Adoro mi trabajo. Como cualquier asalariado promedio paso más de 47 horas en el tajo cada semana; el 54 por ciento de las abejas obreras desaprovechamos la mitad de nuestros días de vacaciones cada año.
La droga preferida para algunos de los que trabajan en línea es la falta de sueño. Muchos autónomos y ejecutivos perpetúan el mito de que solo necesitan 4 horas de sueño para funcionar al más alto nivel …
Cada día aumenta el número de estafadores que se afanan tras empresas de tecnología, donde los derechos laborales básicos se erosionan, mientras esperan ser el próximo unicornio multimillonario con su propia startup.
Alguna de estas nuevas empresas se intenta financiar solo a través de fondos de capital de riesgo. Estas empresas y fondos “disruptivos” apuntan hacia la dominación completa de la especie trabajadora, peones que serán esclavos hasta que mueran.
Nuestros cuerpos se destruyen de manera lenta y secreta. Los estudios muestran que la falta de sueño o la mala calidad del sueño pueden causar ansiedad, anomalías en el control sobre las emociones, dolor físico y comportamiento impulsivo, lo que puede puede derivar a comer, beber o fumar demasiado, cuanto menos.
Una entrevista de 2018 del The New York Times a Elon Musk, muestra al ejecutivo de Tesla encarnando este fenómeno: en la misma, confesó su dependencia al Ambien, (Zolpiden), para ayudarlo a dormir. Está documentado que lloró en otra entrevista mientras discutía los desafíos de producción de automóviles que enfrentaba su empresa.
Mientras que algunos trabajan por elección en lugar de por necesidad, millones de personas entran en sus años dorados con finanzas alarmantemente frágiles. Las recesiones económicas ya habían devastado los ahorros de muchísimas familias antes de la llegada del Coronavirus. Y entramos en una época en la que 10.000 baby boomers del todo el mundo cumplen 65 años todos los días…
Planes de pensiones y jubilaciones han perdido alrededor de un tercio de su poder adquisitivo desde el año 2000.
Los que no van a poder retirarse nunca frente a los adictos al trabajo
Pensemos en los millennial: según una encuesta global entre personas de 20 a 34 años realizada por Manpower Group, éstos se enfrentan a grandes deudas por sus estudios, viviendas caras y un crecimiento salarial lento. Muchos dudan de que puedan jubilarse como sus padres. Más de un tercio espera trabajar hasta bien entrados los 70 años. Aproximadamente 1 de cada 8 dijeron creer que tendrán que trabajar hasta morir.
LOCA POR EL TRABAJO
EL ESCLAVO MODERNO
