1999. Exterior. Día.
Tocamos por primera vez la nueva moneda europea que llegaba a nuestros bolsillos. Nos preparamos para un fallo potencial de sistemas informáticos que nunca llegó a nuestros ordenadores. Para despedir año, siglo y milenio bailamos con Britney Spears, los Backstreet Boys y sobre todo con «Livin’ la Vida Loca» de Ricky Martin. Vimos por televisión como la OTAN bombardeaba Yugoslavia en la guerra de Kosovo. Pero justo en el momento que caían las bombas, el 24 de marzo del 1999, hubo otro hecho a miles de kilómetros que me atrevo a decir que marcó aún más el curso de nuestra existencia y que todos recordamos mucho mejor. Aquel 24 de marzo en Westwood, California se estrenó la película “Matrix” de las hermanas Wachowski (hermanos en 1999). En España tuvimos que esperar hasta el 23 de junio. Algunos que no estábamos bailando con Ricky Martin la vimos en algún cine de verano al aire libre de los que ya casi no quedan.

Pero que un árbol no nos quite la visión (el visionado) del bosque. Porque no solo se estrenó “Matrix” hace 25 años sino que también pudimos ver… preparen palomitas y apaguen los móviles que no tenían en 1999 para ver esto: “El club de la lucha” de David Fincher, “El sexto sentido” de Syamalan, “La milla verde” de Frank Darabont, “Magnolia” de Paul Thomas Anderson, “Star Wars Episodio 1: La amenaza fantasma “ de George Lucas, “American Beauty” de Sam Mendes, “Las vírgenes suicidas” de Sofia Coppola, “Una historia verdadera” David Lynch y como no “Todo sobre mi madre” que nos dío el Oscar a mejor película extranjera para España y el premio de mejor director para Almodovar en Cannes, casi nada. No he querido mencionar (pero lo voy ha hacer) otras películas que no son tan conocidas para el gran público pero que fueron al igual que éstas obras mayores, como: “Las normas de la casa de la sidra”, “Notting Hill”,
“Toy Story 2”, “El proyecto de la bruja de Blair”, “Cómo ser John Malkovich” o “Tarzán”.
He nombrado 16 películas sin tener que buscar demasiado y si miro en los archivos de imdb saco otras 16 más, pero la más importante no la he citado aún. Digo la más importante, no la mejor ni la que ganó más premios, sino la obra cinematográfica más importante de aquel gran año 1999, que justo al contrario que “Matrix” que fue una ópera prima, esta otra película venía a poner el punto y final de la filmografía del que para muchos es el mejor director del siglo XX y por ende de prácticamente todo el séptimo arte que en 1999 cumplía 104 años (que no son nada para un arte mayor) desde que el 28 de diciembre de 1895 los hermanos Lumière realizaron la primera proyección pública.
Ese film que por fin (hacía 12 años que no estrenaba película su director) vio la luz en 1999 es “Eyes Wide Shut” de Stanley Kubrick. Unos días antes del estreno de “Matrix” el 7 de marzo moría Kubrik en su casa señorial de Reino Unido y nos dejaba un broche de oro para cerrar su filmografía. La película se estrenó el 13 de julio en EEUU y el 17 de septiembre en España. No comentaré la sinopsis del film, pero por si hay alguien despistado le diré que es una película “navideña” rodada en Nueva York con Nicole Kidman y Tom Cruise de protagonistas que además de ser matrimonio en la ficción lo eran en la realidad y que tras la película acabarían divorciándose. Está basada en la novela «Traumnovelle» (Relato soñado) de Arthur Schnitzler y es un ejemplo más (me perdone Schnitzler) de como surgen grandes obras cinematográficas de adaptaciones de obras literarias no tan brillantes, porque casi nunca surgen por adaptaciones de grandes obras literarias.
Considero que no es casualidad que aquel año se estrenaran tal cantidad de grandes películas, es como si todos aquellos grandes directores quisieran estrenar sus obras por lo que pudiera venir después de 1999, un año que cerraba un ciclo milenario que había comenzado 999 años antes con el apogeo de los Mayas en Yucatán y la llegada de los Vikingos a Terranova, que finalizaba el 31 de diciembre de 1999 con la renuncia de Boris Yeltsin y el nombramiento de un tal Vladimir Putin como presidente de la Federación Rusa. Visto 25 años después creo que fue lo mejor que pudo pasarle al cine ya que sería difícil enumerar en una lista tantas buenas películas en este primer cuarto de siglo como las que hubo en aquel año.
La llegada de un final, sea del tipo que sea, para un artista es un lubricante de creatividad.
Quedémonos con estas grandes películas para inspirarnos en los próximos años y con la frase final en la filmografía de Kubrik que pronuncia Nicole Kidman: “…hay algo muy importante que debemos de hacer lo antes posible…follar
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