Hay innobles personajes
que aprovechan la amistad
para estafar un secreto
y a veces hasta dinero.
Los necios ignoran que ganan en más
pues cuanta más confianza roban
más tienen de despreciables;
tampoco saben que cuanto más traicionan
más pierden en dignidad.
Si a tal honor tal enemigo
no es de extrañar que el infame
luche contra sus instintos
y su propia deshonra le gane.
Si eres amigo de lisonjas mezquinas
y en tu interés vas a burlar mi honor y el tuyo mismo
mejor busca otro sitio,
que aquí para burdel sobran esquinas.