DESDE EL GRIAL DEL ALMA, HILVANO VERSOS, EN ESPIRAL DE PLATA.

De Tales a Nietzsche es el juego que nunca acaba.

0
18997
93
Composición PLAZABIERTA.COM

 

Hablo contigo, Alma, cuando me quiero.
Me sacudo las ideas, que se hacen versos.
Comprendo, aunque no entiendo.
Se hace la calma, se hace el silencio.
Como “aquélla”; muero porque no muero.
Tiro oros, bastos y espadas, lleno las copas de vino nuevo.
A los arcanos mayores viajo y me entrego.
Del “Mago Loco”, al “Loco Mago”, volviendo luego.

De oca a oca y tiro porque me toca, es otro juego.
Los arcanos del alma, el Tarot de antaño.
Son lecciones de veintidós pasos.
Camino circular que comienza con el Loco,
Según se mire, comienza con el Mago.
El veintiuno no es el final; es el “Tres Teosófico y Sagrado”.
El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Dos y uno unidos para hacer el Mundo;
la Sacerdotisa y el Mago.
el Uróboros se muerde la cola; no ha terminado.

Los cuatro elementos del camino del “Mago Loco”;
que no recuerda quién es, hasta llegar al “Loco Mago”;
que se ha desecho de armas y riquezas, embriagado por el cáliz sagrado.
Tierra, Aire, fuego…; pero el agua fue primero; lo dijo el sabio griego.
Comienzo y final del mundo, según Tales de Mileto.

La corte del reino humano,
con su rey, su reina, sus caballeros, pajes y vasallos;
por las torres flanqueados.
Juego de ajedrez de la vida; de blanco y negro pintado.
Llegados a la octava los peones se coronan reina, sin embargo.
Reina a la que protege el caballo.
Reina que dio un beso de muerte al monarca derribado.
Ella, El Alma, por fin ha vencido al mundo, desde un peón coronado.

Pasamos a otro juego.
A veces pintan oros, espadas o bastos.
Se “cantan las cuarenta” desde el desierto.
También desde el monte de los olivos sagrados.
Son las copas del alma.
El cáliz de los versos invertidos.
El Santo Grial, que contiene la clave,
inserta en la espiral de versos.

Versos de plata de Luna, que busca a su sol dorado.
Lo intimida y lo oculta en su lecho de estrellas.
bajo la Cruz del Sur yace postrado.
El toroide hace que el rey renazca;
Ahora será un “Mago Loco” y desmemoriado;
no recordará que la Diosa de la Noche besó de muerte sus labios.

Y toca un cuento de los de antaño:
Los rastros del pan del camino,
se los han comido los pájaros.
Vaga la mente y despierta, sabiendo que va soñando.

También los mitos sirven de mucho, sirven de algo:
Atado a un Hilo rojo,
a una pulsera hilvanado,
sujeta Teseo su vida, en busca del Minotauro.
Ariadna se lo ha entregado.
Del laberinto se sale, pero no uses oros, espadas, ni bastos.
Al Minotauro lo vence la fuerza del más osado.
Vuelve Teseo -suspira Ariadna-.
Mientras, el hilo, une a la amada y al amado.

Las Bodas Sagradas se consuman.
Las estrellas en toroide bailan.
Allí, Lorenzo y Catalina danzan;
En luz y oscuridad; risas y llantos; tormenta y calma.
Han nacido para la eternidad y la eternidad los llama.
Un triste tango, un dulce vals, ellos bailan.
Extremos opuestos de la misma cuerda.
Construyen al arcano veintiuno, cuando se aman.

Esos son mis versos invertidos;
los que he sellado en espiral con hilo de plata,
en el interior del Cáliz;
Santo Grial, que contiene al alma.

El alma es pura metáfora. Habla en palabras de estampas vivas, que se hacen carne cuando duelen, cuando aman. Observa al gusano que somos, tejiendo la seda del capullo de Uróboro, envuelto en la muerte de sueños. Naciendo a la vigilia de alas.
Se nace sabiendo y al morir se sabe.

El camino es olvido, sueño, pero si vas despertando es recuerdo; recuerdo de los pasos que ya se dieron; “El eterno retorno”… lo dijo Nietzsche; el loco sabio, el sabio loco.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí