► «No hay investigación que no sea finalmente reductible a un problema matemático de números».
— Auguste Comte (1798−1857). Filósofo y matemático francés, considerado el fundador del Positivismo y de la Sociología.
► «Vivir para los demás no es solamente una ley de deber, sino también una ley de felicidad».
► «Sólo los buenos sentimientos pueden unirnos, el interés jamás ha forjado uniones duraderas».
► «Saber para prever, a fin de poder».
► «La fórmula del positivismo: el amor como principio, el orden como base, el progreso como fin».
► «Sólo hay una máxima absoluta y es que no hay nada absoluto».
► «Para entender una ciencia es necesario conocer su historia».
— Auguste Comte
Auguste Comte era una persona muy inteligente y dotado de una gran memoria, sus calificaciones escolares eran elevadas pero sobresalía por una gran rebeldía.
Tras una primera juventud agitada, Comte ingresó en 1814 en la Escuela Politécnica de París, donde realizo realizó estudios de Ciencias Exactas e Ingeniería. Las circunstancias políticas y personales obligaron al joven a completar sus estudios de forma autodidacta y ganarse el sustento impartiendo clases particulares de matemáticas, principal fuente de ingresos durante casi todo el resto de su vida.
Comte creó la palabra altruismo (dar sin esperar nada a cambio), consecuente con su forma de vida, ya que daba clases gratis de astronomía, escribió una enciclopedia de varios tomos él solo y procuró mejorar con su pensamiento un mundo avaro en el que él se empobreció. Esta Filosofía tuvo cierta influencia universal, incluso en la fundación de países, como Brasil, en cuya bandera aparece la leyenda “Orden y Progreso” que es parte de la tríada filosófica de Comte (Altruismo, Orden, Progreso).
Con la publicación de su “Curso de filosofía positiva” (1830−1842), Comte concibe la ciencia como una fuente de progreso, hacia la que estableció un verdadero culto:
► «El conocimiento objetivo que proporciona la ciencia debía aplicarse a la ordenación de los asuntos políticos, económicos y sociales, superando tanto los oscurantismos teológicos o metafísicos como las ideologías apoyadas en la imaginación, los intereses o los sentimientos».
La idea fundamental de Comte era que el conjunto de todas las ciencias se ordenaba en un escalafón jerárquico, que van de las más abstractas a las más concretas de manera que cada eslabón dependía del anterior de acuerdo a la complejidad de los fenómenos que se estudien. En la base de los cimientos estaban la Matemática, seguida de la Mecánica, la Física, la Química, la Biología y por último, en la cabeza de la pirámide de las ciencias se encontraba la Ciencia de la Sociedad: la Sociología.Para Comte esta ciencia, que también la llama “física social”, daría las respuestas a los problemas fundamentales del hombre y de la sociedad.
No solo los problemas sociales, también los problemas morales han de ser analizados desde una perspectiva científica del Positivismo que se asienta en la observación empírica de los fenómenos, que permita investigar, descubrir, revelar y explicar el comportamiento de los fenómenos en términos de leyes universales susceptibles de ser esgrimidas en provecho de toda la Humanidad.